Disclaimer: Algunos
nombres fueron cambiados porque no tengo la autorización de las personas y
porque estos post son mi perspectiva y opinión particular, no representan la
realidad de dichas personas, y si logran identificarse, les pido una atenta
disculpa.
Hace poco tuve una relación, las
cosas no funcionaron, pero puedo decir que de la experiencia aprendí muchas
cosas, sobre todo a aplicar lo que poco a poco he ido aprendiendo en mi
autodescubrimiento.
Obvio tuve mi proceso de sanación, en
este proceso, mi hermana me acompaño, de las pláticas que sostuvimos le comenté
a mi hermana, “Lo que más me duele es que
él se adecuaba a lo que yo esperaba en una relación y en una pareja” a lo
que mi hermana, sabiamente me dijo “Entonces
tu no querías una pareja, tú estabas cubriendo una vacante de empleo” y yo
contesté “Claro que no, no soy tan
superficial”, a lo que nuevamente, sabia y analítica me contesto: “Tu y Emir le ponen requisitos a una persona
con la que quieren pasar el resto de sus vidas, y ponen tantos peros, como si
estuvieran contratando a alguien.”
Sinceramente, en ese momento pensé
que mi hermana era una exagerada y que me tenía mala fe, sin embargo, como en
la mayoría de los casos, la vida le está dando la oportunidad de decirme, por enésima
vez, “te lo dije”.
Esta semana que paso, fue mi
cumpleaños, tuve muchas reuniones con mis seres queridos, excepto una reunión,
y no es que esta persona no sea querida, sinceramente es bastante apreciada y
espero pueda leer con objetividad, aunque sinceramente lo dudo, porque para él,
siempre estoy equivocada, siempre ha sido así durante casi 10 años.
Él fue mi novio, posiblemente mi
primer amor, él fue quien me enseño lo que era enamorarse, pero al final del
día, éramos niños jugando a algo que no teníamos remota idea y que
sinceramente, actualmente tampoco la tenemos.
La cita tuvo lugar en un café, la
verdad, una de las grandes constantes entre él y yo es que siempre terminamos
difiriendo en nuestras opiniones, tenemos pensamientos totalmente opuestos, pero
tenemos el mismo objetivo, los dos queremos una familia, amanecer con la
persona amada, una casa hermosa y unos hijos maravillosos.
Me considero, a pesar de todo, una
persona inteligente y puedo estar consciente de lo que realmente siento por una
persona, puedo ser objetiva y definir claramente cuáles son los sentimientos
que tengo para esta.
Este chico fue la pauta incluso
para que en su momento mi padre me regalará un libro muy bueno llamado “El Arte de Amar” de Erich Fromm.
Una de las principales premisas del
libro, es lo que el autor denomina como “Separatidad”
que viene siendo un intento de traducción para definir la angustia de
sentir aislado, y es aquí donde entra otro libro “Aprender a amar” de Osho que nos enseña algo sumamente importante,
la soledad no es aislamiento, el aislamiento es tristeza y provoca la sensación
de estar incompleto. La soledad conlleva la sensación de estar pleno. No
necesitas a nadie, tu solo te bastas.
Entre la plática, yo manifesté que
actualmente, ni queriendo, era la misma mujer que hace diez años, tierna, dulce
e ingenua, soy una mujer sumamente dulce pero también bastante cínica y
bastante realista. Creo en el amor, creo totalmente en el romance, pero en el
romance sano, no en ese romance enfermo que se empeña a llenar vacíos que uno
mismo tiene.
Personalmente, me siento cómoda en
mi piel, amo la vida que tengo, si tengo un compañero con quien compartir las
buenas noticias o las malas jugadas de la vida, solo es un plus, porque tengo a
mis amigos y familia, y como lo dice Osho “El
amor en su forma más pura consiste en compartir alegría. No pide nada a cambio,
no pide nada.” El amor es libertad,
no es un deber.
Sin embargo, mi estimado amigo,
fiel a su costumbre, vio por sus necesidades, y me manifestó algo que me dio
terror: “Tu cumples todos los requisitos
que deseo en una esposa” como si se tratará de una vacante de empleo.
Pongamos atención en la etimología
de la palabra “vacante”, viene del
latín “vacantis” y significa “vacío”.
Esa palabrita de nuevo, ¿verdad? Vacío, nuestro querido amigo está vacío,
necesita sentir que existe otra persona que le pueda dar eso que el mismo se ha
negado. Y lamentablemente esta tan cegado en su oscuridad aislada que me
aseguró “Yo puedo darte eso que tu deseas”.
Su vanidad lo hace creerse la respuesta a todas mis interrogantes. Lamento
decirlo, y no me crean arrogante, pero fue uno de los momentos más incomodos de
mi vida, ver como una persona tan negada a aceptar sus vacíos, pero peor aún, a
repararlos de la manera adecuada, tan aferrado a arrastrarme a sus necedades,
se me hizo tan… tonto, sin sentido, tan hueco.
El amor es libertad, eliges un
compañero de vida, no un compañero de celda que decida por ti. Todo aquello que
destruya la libertad no es amor.
Empiezo a creer que mi vida está
escrita por un guionista de comedias románticas, porque, para reafirmar mi
desagrado total por esa propuesta tan infame, pasaron frente al café Carl y
Ellie, con su pequeña hija. Dios, gracias por cuidarme tanto. Ellos son la
confirmación que el verdadero amor es la libertad de estar juntos. Sin
controles, sin yugos, simplemente dos almas fluyendo, respetándose, cuidándose,
construyendo.
El amor inspira tranquilidad, paz,
armonía, respeto. Para nada es ese intento exhaustivo por hacer las cosas de
acuerdo a un plan o meta, como si se tratará de una checklist.
No es que se busquen una lista de “requisitos”
sin embargo, si es necesaria una lista de virtudes y capacidades para que una
relación sea lo bastante sólida para afrontar lo que conlleve.
Al final tuve razón, su impaciencia
lo determino a que, como no cumplí “sus necesidades” decidió apartarse de mí,
en un (y de verdad espero que sea así) último berrinche y desplante de
soberbia. Nadie está hecho para nadie. Cada uno es diferente a los demás. El
verdadero amor te hace individual, no te convierte en esclavo de los deseos y
vacíos de alguien más. No intentas completar a la otra persona, pues esta, si
está bien trabajada en su autodescubrimiento, será plena por sí misma, su
alegría al compartirla solo se multiplicará.
El amor da libertad, no te
conformes con menos.
Esta fue mi lección aprendida ¿Cuál
es la tuya?
Les mando un beso enorme lleno de
buena vibra y luz…
Recuerda, no eres pieza de
rompecabezas, no completas a alguien, eres como la chelita, complementas la
botana 😉
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